Este mes de diciembre despediremos el año en un lugar diferente, en la ermita de Santiago de Loizaga, municipio de Galdames. La primera noticia de esta ermita procede de 1416, al ser incluida en las pertenecientes al patrimonio de realengo y cedido su patronato a la familia de los Salazar y los Murga, a los cuales estarían ligados familiarmente los Loizaga o Loyzaga.
El municipio de Galdames está compuesto por muchos barrios, distribuidos en tres feligresías: Santa María de Montellano, San Esteban y San Pedro. Bueno pues junto a esta ermita se conservan unos muros donde antiguamente estuvo una cuarta feligresía, la de Santiago de Loizaga. Una placa situada en uno de los muros: “Ruinas de la primitiva parroquia de Santiago de Concejuelo”.
Aunque la ermita está situada en el barrio de Concejuelo, se la llama así por la antigua vinculación con la poderosa familia Loizaga y por su situación en el límite territorial de esta familia. Hay que tener en cuenta que, en ocasiones, la casa-torre tiene próxima una ermita, como aquí, en la que los Loizaga ejercían de patronos. En uno de sus muros luce el escudo de armas de los Loizaga.
Llama la atención el recinto amurallado situado a escasos metros, son los que salvaguardan la Torre de Loizaga, símbolo de poder, testigo de una época en la que se asentaron en las Encartaciones importantes familias hidalgas, enfrentadas por poder y riqueza.
Se construyó hacia 1.330 por Ochoa García de Loyzaga, primer señor de Loyzaga en arraigar el apellido, cuando las rutas comerciales confluían aquí estratégicamente hacia la costa.
Con el tiempo la torre queda en desuso, en ruinas. El empresario Miguel de la Vía (1932-2009) compra el solar en 1985 para cumplir sus sueños. Sobre las ruinas de la antigua torre levanta veinticinco metros de muros con troneras, vanos y almenas, aportando al conjunto un aire medieval. Una gran muralla dotada de cubos, barbacana y puente levadizo remata el conjunto.
Pero en este siglo en el que vivimos, a parte de la torre, lo que llama la atención es lo que guardan sus muros, una colección insuperable compuesta por 75 coches antiguos y clásicos, la única colección de Europa de Rolls – Royce fabricados entre 1932 a 2009. Es museo desde el año 2000 https://torreloizaga.com/ y forma parte de la Red Europea de Patrimonio Industrial. El sueño de Miguel.
Si no lo has visto, no te lo puedes perder, no conocerás otro igual.
Partimos de la Plaza San Severino y por la BI-630 vamos hasta la entrada del barrio Castillo la Piedra. Ascendemos por pista de hormigón por la vertiente S. de La Garbea hasta la pista que sube de la Herbosa. Bajamos hasta este barrio de Sopuerta y por Bezi a la vertiente sur de Longitas. Bajamos por pista de hormigón muy empinada entre eucaliptos hasta otra que parte a la izquierda para llegar a Carral.
Salimos a la rotonda y continuamos por la carretera de Avellaneda 0.4 km para meternos por pista a la izquierda. Ascendemos 1.1 km y nos metemos a la izquierda por sendero que serpentea por la vertiente norte del cordal Larrea-Ubieta-Pico Cinto 1.6 km. Estamos ya a 0.4 km bajo la ermita, distancia corta, pero con bastante desnivel para acceder a ella.
Ermita de Santiago de Loizaga y Torre de Loizaga. Para esta quedada aprovechamos las instalaciones de la ermita para hacer un hamaiketako; a nivel particular, sugiero la visita del museo cualquier otro día con más tranquilidad.
Proseguimos por pista de hormigón hacia el barrio de Larrea, bajamos a la carretera y por el Alto de Umaran a Güeñes, Zalla y Balmaseda.
Distancia: 36.8 km
Desnivel +: 933 m
Desnivel -: 974 m
Imágenes:
Wikiloc:
Vídeo:
Comments