top of page

Ruta Santa Águeda

2ª Quedada BBe 2024


 

Águeda, toda una mujer que dio su vida por Jesucristo y que a lo largo de la historia ha sido estandarte en la vida de muchas mujeres pero, por desgracia, también un martirio para otras muchas, al utilizar su historia muchos hombres para martirizar a las mujeres.


Cuenta la hagiografía que nació en Catania (Sicilia) en el 230, de una distinguida familia y que poseía una belleza extraordinaria, pero consagró su fe y virginidad a Jesucristo. En tiempos del emperador Decio contra los cristianos, (249-251) el gobernador de la isla Quinciano quiso que se casara con él y que sacrificara a los dioses, pero Águeda se negó a ello por ser cristiana. Como venganza fue entregada a una prostituta, Afrodisia, la cual regentaba un burdel con sus siete hijas, para forzarla a practicar la prostitución. Resultó en vano, Águeda evitó aquel oficio y se refugió en la oración.

Llamada de nuevo al tribunal, fue condenada a padecer atroces torturas: descoyuntada en el potro, azotada con varas, desgarrada con garfios, quemada con antorchas y finalmente le fueron amputados los pechos. Es aquí cuando ella recrimina al procónsul haber dado orden de mutilar en ella los mismos órganos con que su madre le habría amamantado de pequeño, frase que se ha hecho muy célebre. Arrojada moribunda a la celda, se le apareció San Pedro, curándola por completo. Pero seguía torturándola. Esparcieron por el suelo de su celda trozos de vidrio, cerámica rota y brasas, revolcándola desnuda sobre este lecho…

Águeda, alabando a Dios murió a consecuencia de las heridas el 5 de febrero del 251.

Los cristianos le dieron sepultura en el lugar que hoy ocupa la catedral de Catania, celebrando su fiesta cada 5 de febrero. Un año después el volcán Etna entró en erupción, amenazando la supervivencia de la ciudad. Entonces, no los cristianos, sino los paganos, echaron a correr al sepulcro de la mártir, lo abrieron, cogieron el velo que cubría su cadáver y lo extendieron frente a la colada de lava que ya se acercaba sobre la ciudad. Inmediatamente la erupción se calmó y la lava se detuvo. Esto ocurrió hasta nueve veces más en los sucesivos años, lo que le dio el patronazgo sobre los incendios, erupciones volcánicas y desastres del fuego en general. 

Es la patrona de las mujeres, sean casadas o solteras, gestantes que desean tener un buen parto, madres con insuficiencia de leche y sobre todo hoy en día por el cáncer de mama. También contra los malos espíritus, enfermedades del ganado y para potenciar la producción agraria.

La popularidad de esta santa en el País Vasco ha sido muy grande, como lo demuestran las muchas ermitas a ella dedicada. Se la atribuye, además, la faceta sanadora: la de curar dolores del aparato locomotor, afecciones reumáticas, cefaleas y migrañas.

 Hay también muchas leyendas: En la ermita de Castrejana existía una imagen de esta santa en mármol blanco, con la cabeza separada del tronco. Quienes padecían males de cabeza entraban por una puerta de la sacristía llevando en sus manos la cabeza de la santa y salían por la otra. Haciendo esto tres veces seguidas se curaban.

 En Barcus (Zuberoa), a pesar de ser día de Santa Águeda, una mujer se puso a hacer una hornada. Un gato le cogió y comió un pedazo de masa de pan. “Quita de ahí gato”, dijo ella y entonces Santa Águeda dio por respuesta: “no soy gata, pero sí Santa Ágata”, mira hacia atrás y vio que la casa ardía. Por eso allí en el día de Santa Águeda no solían hacerse trabajos ni de horno, ni de lavado.

 En muchas ermitas, quienes tienen verrugas las frotan con una moneda y luego la depositan como limosna antes de dedicar una oración.La víspera de Santa Águeda (en euskera Agate Deuna Bezpera), es costumbre en muchos pueblos del País Vasco el salir a cantar las coplas de vísperas de Santa Águeda. La costumbre marca que se salga en cuadrillas por las calles de los pueblos y ciudades, yendo de puerta en puerta cantando coplas a la santa y recogiendo dinero para diferentes causas. Se suelen acompañar de bastones (makilas) y palos con los que se golpea el suelo rítmicamente. Al final de la canción se golpea la tierra con más fuerza, retumba. Se alzan las makilas y un grito suena al unísono: ¡EUPP!

Coral Kolitza de Balmaseda cantando a Santa Águeda: https://fb.watch/pSpl8cfV0S/

El santuario a visitar está situado en un rellano a 207 m de altura, en las estribaciones del monte Arroleza 454 m, en el barrio baracaldés de Castrejana y sobre la calzada del Puente Del Diablo o de Las Brujas, en el Camino de Santiago de la Costa y muy cerca del Viejo camino de Santiago que unía Bilbao y Castilla a través de Balmaseda y el Valle de Mena. Situación también estratégica en todas las guerras civiles de los siglos XIX y XX.

En su interior, desde 1584 se halla la virgen y mártir siciliana Santa Águeda, Gadea o Ágata (del griego agathé, “bondadosa”).

¡Cómo han cambiado los roles en la sociedad!, el matriarcado forma parte de la historia y es que las primeras sociedades eran matriarcados. La relación entre Santa Águeda y el poder femenino tiene su origen en la mitología clásica. Las Amazonas era un pueblo conformado y gobernado íntegramente por mujeres guerreras, a las cuales las faltaba un pecho para disparar mejor las flechas. Con el tiempo se produjo el cambio hacia un modelo de sociedad patriarcal.

Santa Águeda, como patrona de las mujeres, en muchos pueblos de España cada 5 de febrero las mujeres ¡mandan!, son las “Águedas”, recuperan ese rol del matriarcado. Un buen ejemplo es Segovia, origen de esta fiesta. En el siglo XI los árabes ocupaban la ciudad, había que echarlos, así que mientras las mujeres de Zamarramala distraían a los sitiadores, los hombres se hacían con El Alcázar y la ciudad. Cuando se dieron cuenta de la artimaña fueron a por la cabecilla y la cortaron los pechos, dándola el mismo martirio que a Santa Águeda.

 Para visitarla, partimos de la Plaza San Severino y por el bidegorri, (Viejo Camino de Santiago) hasta el barrio de Ibarra, donde salimos a la carretera para alcanzar el de Aranguren. Recorremos el corto tramo junto al Cadagua y volvemos a la carretera para llegar a Güeñes. Tomamos la carretera de Galdames (BI-3631) y tras 2.09 km de ascensión nos metemos a la derecha. Subimos por Amabizkar koikoa, el tramo más duro de la ruta 3.2 km. Una vaguada nos permite recuperar el aliento para seguir subiendo 2.4 km a la vertiente N. del Eretza 887 m.

Tenemos ahora por delante 4.4 km de descenso hasta el barrio de Saratxo, que tras cruzarlo y a través de las faldas de Apuko 561 m alcanzamos la Sierra de Sasiburu. Esta empieza en Cruces (Baracaldo) y Zorroza, en la margen izquierda del río Cadagua. La cresta se prolonga en dirección E. – W. separando las cuencas de los ríos Cadagua y Galindo, dominando las poblaciones de Castrejana, Alonsótegui, Zaramillo, El Regato etc.

La sierra está constituida por cuatro cimas de altitud similar, separadas por pequeños collados: Arroleza 455 m, Tellitu 458 m, Sasiburu 459 m, Humilladero 391 m y Peñas Blancas 469 m. Una vez que ascendemos, con Apuko a la derecha, bajamos junto a la pequeña y blanca loma caliza de Peñas Blancas y poco más adelante por la de Humilladero, destacando por su cruz blanca en la cima. Llegamos entonces al collado Salgeta, las vistas ya son espectaculares hacia las poblaciones de la margen izquierda y derecha del Nervión, así como de la sierra de Ganekogorta y Ganeta, Alonsótegui y una parte de la cuenca del Cadagua.

 Pasamos a la vertiente N. de la Sierra de Sasiburu y tras llanear unos metros tenemos un descenso de 2.4 km hasta el camino por el que vienen los romeros de Cruces (Baracaldo). A partir de aquí, el día de la romería se mueve mucha gente, por lo que hay que tener especial cuidado y respeto hacia los caminantes. El santuario es un hormiguero de gente. Tras las “rogativas” descendemos 1 km al barrio de Las Delicias con mucho cuidado, la carretera tiene mucha pendiente y por ella se mueve mucha gente.

Ya solo nos queda el Corredor del Cadagua, 26.0 km. Hasta que no llegue la Vía Verde del Cadagua a Bilbao, tenemos que ir por carretera hasta Arbuio, donde accedemos por la izquierda a la vía verde, rodando a través de los municipios de Güeñes y Zalla para llegar a Balmaseda.


Distancia: 58.45km

Desnivel+: 1.055m

Desnivel-: 1.045m

Tiempo: 4:15:00 h


Imágenes:




Ver en Wikiloc:




Vídeo:




118 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page